
El aceite de bacalao resulta un remedio bastante eficaz para aminorar las consecuencias asociadas a la artritis porque puede demorar o revertir el deterioro de las articulaciones de cartílago y disminuir el dolor inflamatorio. Y todo gracias a los ácidos grasos Omega-3 que contiene, capaces de desactivar las enzimas que provocan la inflamación y dolor de las articulaciones.
"Hemos demostrado -asegura
Bruce Caterson, profesor de la Escuela de Biomedicina de Cardiff y responsable de esta investigación- que podemos demorar o eliminar las actividades de las enzimas que deterioran los cartílagos en la artitris y que podemos bajar la inflamación a un nivel muy bajo".