sábado, 18 de mayo de 2013

La Maquina de Antikythera

La maquina de Antikythera es uno de los objetos mas conocidos y avanzados a su época, un verdadero ordenador antes de su tiempo, ideado para el calculo de los movimientos de los cuerpos celestes de nuestro sistema solar, que data de la época griega alejandrina. Encontrada en 1900 entre  los distintos objetos del cargamento de un barco hundido frente a la isla griega de Antikythera, es una muestra de los avances tecnologicos de la antigua Grecia.

En los últimos años este mecanismo, conservado en el Museo de Atenas, ha sido objeto de diversas investigaciones científicas que han dado un paso importante para la plena comprension de su funcionamiento, su finalidad y, especialmente, de la brillante mente que la concibió.

El primer estudio detallado del dispositivo, realizado en los años 60 del siglo pasado por el historiador británico Derek de Solla Price, de la Universidad de Yale (EE.UU.), revelo que el mecanismo era "un ordenador astronómico con el que se calculaban las posiciones de los cuerpos celestes, o al menos del Sol y de la Luna, y se preveían los fenómenos astronómicos". Según Price, "la característica técnica mas espectacular es que el mecanismo de Antikythera es una plataforma giratoria diferencial, un mecanismo que se volverá a ver en Europa solo después del 1500".

En resumen, el primer estudio de este anacronismo arqueológico, que posteriormente fue considerado una especie de precursor de la computadora, aporto nuevos y extraordinarios conocimientos a las teorías oficiales acerca del nivel alcanzado por la tecnología en el periodo heleno. De hecho, su complejidad, con todos sus sofisticados engranajes, las esferas y las placas grabadas, parecía estar fuera de lugar en el contexto de la antigua Grecia. Esta era la opinión de los expertos después de los estudios de De Solla Price, pero los científicos de hoy están convencidos de que la maquina de Antikythera no es una caso aislado, sino la única superviviente hasta ahora de una larga tradición de complejos dispositivos mecánicos de la época antigua.

Tras Derek de Solla Price, en 2003, fue Michael Wright, responsable de la sección de Ingeniería Mecánica del Museo de Ciencias de Londres, quien proporciono nuevos datos científicos sobre este antiguo y misterioso artefacto. Wright, a partir de los estudios de De Solla Price, analizo el dispositivo directamente en el Museo de Atenas. Hizo algunas placas con rayos X utilizando la técnica de la tomografía lineal, que aun se conocía en la época de Price. Esta proporciono imagenes bien definidas que revelaron la ubicación de los componentes internos del mecanismo, antes invisibles por la imposibilidad de desmontar el dispositivo, dañado por las circunstancias marinas producidas por 2000 años de inmersión en agua salada. Y, según Wright, Price adapto parte de la información sobre determinados engranajes internos que estaban incompletos para demostrar así algunas relaciones astronómicas importantes y hacerlas encajar en su teoría.

Examinando con atención el objeto, Wright encontró un perno en el centro de la rueda principal que Price no había identificado, al cual se fijaba un engranaje que permitía a las otras ruedas dentadas rotar a su alrededor: Un descubrimiento que según Wright, demostraría que la "computadora" de Antikythera fue un mecanismo concebido para reproducir fielmente un movimiento epicicloidal. El erudito británico hallo evidencias de que la maquina era capaz de reproducir fielmente no solo el movimiento del Sol y de la Luna (usando un modelo epicíclico derivado de la idea de Hiparlo, del siglo II a.C.), y de los planetas Mercurio y Venus (utilizando el modelo epicicloidal surgido de los estudios de Apolonio de Perga, el matemático griego creador de la "teoría de las cónicas", del siglo III a.C.), sino que gracias a otro dispositivo "perdido" colocado por encima del mecanismo y que a su vez controlaba otros engranajes, podía marcar el movimiento de los tres planetas conocidos en esa época: Marte, Júpiter y Saturno.

Nos encontramos entonces con un sistema capaz de indicar la posición exacta para una fecha concreta de todos los cuerpos celestes identificados por entonces, algo que haría a través de los marcadores de bronce situados en una manivela circular marcada por las constelaciones zodiacales, Wright también replico un modelo del mecanismo que consideraba fiel al diseño original.

Las investigaciones mas reveladoras, sin embargo, se han efectuado en los últimos años por parte de un grupo de científicos griegos y británicos dirigido por el profesor Mike Edmunds, astrofísico de la Cardiff University (Reino Unido). Edmunds y su equipo, a través de un escaner especial de ocho toneladas, lograron descubrir una serie de inscripciones disimuladas en el mecanismo -datadas en el año 87 a.C.- ocultas durante mas de 2000 años, gracias al Antikythera Mechanism Research Project. "Habían sido descifrados mas de 1000 caracteres encontrados en el mecanismo, pero ahora hemos conseguido duplicar el texto conocido y hemos descifrado el 95%", ha declarado el físico Yannis  Bitsakis, miembro del equipo.

Entre estos contenidos, celosamente ocultos durante 2000 años por el Mar Egeo, hay también referencias astronómicas escritas en griego antiguo. El enorme escaner ha conseguido fotografiar en tres dimensiones el mecanismo sin que tuviese que salir del Museo Arqueológico de Atenas, donde esta expuesto. Se esta sacando  definitavamente a la luz el funcionamiento interno de este pequeño artilugio de bronce, contenido en un recipiente de madera con forma de cajas de zapatos, que constituye el mas antiguo dispositivo mecánico del planeta. Con solo 20 cm de ancho, este mecanismo único "era una especie de sucesor de los menhires y los círculos-calendario de piedra", ha explicado el astrofísico griego Xenophon Mussas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...