Los romanos ya utilizaban esta planta para calentar las articulaciones, y también la sabiduría popular es conocedora de sus efectos analgésicos.Pero ahora las ortigas (Urtica dioica) han interesado a los científicos de la Universidad británica de Plymouth después de comprobar que frotando las articulaciones artríticas con estas plantas se consigue el mismo efecto que con los antiinflamatorios. Un tratamiento que, a excepción del picor inicial que produce, carece de efectos secundarios.
El D.r Colín Randall indico que el alivio se crea porque los compuestos de esta planta "cambian el concepto del dolor". ¿Como es posible? Randall explico que las ortigas poseen unos pelos finos y rígidos que al entrar en contacto con la piel producen una sustancia irritante que ha resultado ser una mezcla del neurotransmisor serotonina e histamina.
Y ambas sustancias, que afectan a la transmisión del dolor desde las terminaciones nerviosas, provocan una reacción contraria muy similar a la que produce la acupuntura cuando se aplica sobre determinadas zonas del cuerpo.
"Todavía seguimos investigando como funciona esta terapia, pero las ortigas podrían tener un efecto anestésico. En cualquier caso, recomendamos que esta tratamiento se use consultando primero con el medico" añadió Randall.
Y además, las ortigas tienen otros usos terapéuticos como: Sus tallos, en ensalada, son muy ricos en vitaminas, mientras que introducidos en el baño activan la circulacion de la sangre. Sus rizomas ( la parte subterránea o mas pegada al tallo), cocidos en agua con vinagre y aplicado el jugo a la cabeza, sirven para combatir la caspa y la caída del pelo.
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