Frutoterapia

En zumo, seca, fresca, en ensalada, cocida...la principal aportación de la fruta a nuestra nutrición es su contenido de ácido ascorbico, es decir, vitamina C. Sin embargo, la lista de beneficios no acaba aquí: los residuos no digeribles que existen en muchas de ellas sirven para el mantenimiento de la motilidad intestinal.

Además su valor energético es muy bajo, ya que su principal componente en ocasiones por encima del 90%, es el agua.Y es que sea la que sea, la fruta constituye un esplendido regalo al alcance de todos para curar y prevenir enfermedades que podemos aprovechar al máximo si conocemos sus propiedades.

Aquí te mostramos algunas de ellas:

-Albaricoque: Nutritivo, con propiedades antianemicas, antidiarreicas y equilibrantes del sistema nervioso. Su utilización esta indicada para estados depresivos, insomnio, convalecencia y anemia por su riqueza en hierro, cobre y vitamina A. Recomendado especialmente para niños, adolescentes y ancianos, así como para prevenir afecciones cardiacas y cáncer por el betacaroteno que contiene. Usado en zumo también purifica la piel.

-Cereza: Por su alto contenido en potasio, sodio y magnesio ayuda a revitalizar la sangre. Su fósforo y calcio es fundamental para los huesos, de ahí que su ingesta sea recomendable en la época de crecimiento. Conviene a quienes desean reducir el aporte calórico o depurar el organismo (obesidad, arteriosclerosis, reumatismo y gota). Es preferible tomarla cruda o en zumo, bien masticada y ensalivada, evitando ingerir liquido a continuación, ya que se vuelve indigesta.

-Ciruela: Depurador del organismo, es muy apropiada en verano y primavera para realizar curas. Tiene propiedades estimulantes del sistema nervioso, diuréticas, laxantes y desintoxicantes, de ahí que sea muy recomendable para el estres, reumatismo, intoxicaciones alimenticias o hemorroides. Un vaso de zumo dos veces al día, antes de las comidas, dará buenos resultados para el estreñimiento.

-Fresa: Es un fruto alcalinizante, refrescante y remineralizante permitido a los diabéticos. Especialmente indicada en casos de astenia (fatiga) de origen diverso y para los arterioscleroticos e hipertensos, se ha demostrado que la inyección intravenosa de fresa baja la presión sanguínea. Por su contenido en sílice es recomendable para pacientes con cáncer.

-Kiwi: Contiene ácidos orgánicos (cítrico, malico) y un buen porcentaje de vitamina C y riqueza mineral (sobre todo potasio y magnesio). Al poseer mucha fibra sirve para aliviar malas digestiones y depurar el estomago de parásitos infecciosos. Es refrescante y tonificante, por lo que esta indicado para fatigas o estados febriles.

-Limón: Durante algún tiempo fue el alimento mas controvertido de la frutoterapia debido a su excesiva acidez. Pero tras mostrarse sus propiedades antibióticas y antisépticas, a la par que el refuerzo que produce en las defensas, se utiliza sin problemas. Tonifica el corazón y los vasos sanguíneos, reduciendo la viscosidad de la sangre y favoreciendo la secreción de los jugos digestivos (gástricos, pancreáticos, etc.).

-Manzana: Ingeridas por la mañana y en ayunas, depuran, de noche antes de acostarse, actúan como laxantes. La manzana contiene varias sustancias favorables al sueño y al descanso, de ahí que sea de especial interés para las personas nerviosas.En los niños es útil para atajar las diarreas que acompañan a la dentición. En estos casos, así como en los de ulceras gástricas, se puede efectuar una cura de dos días.

-Melón: Refrescante, laxante y diurética (contiene un 95% de agua), estimula el apetito, depura el organismo y embellece la piel. Sus sales potencian la formación de glóbulos rojos y su consumo esta muy recomendado en casos de gota, reumatismos y oliguria (orina escasa). Ingerir su pulpa en ayunas durante una semana resulta efectivo contra el estres. Esta contraindicado para los diabéticos, dispépticos (malas digestiones) y quienes padecen inflamación del intestino.

-Naranja: Fruta "solar" por excelencia (la que mas sol almacena y absorbe), es muy rica en vitamina C, bioflavonoides (protección vascular) y minerales como el calcio, potasio, magnesio, fósforo o hierro. Se trata de un alimento esencial durante la época de crecimiento si queremos asegurar un buen estado de los huesos y dientes. Tiene propiedades tonificantes de los sistemas nerviosos y muscular, antiinfecciosas y desintoxicantes. Su zumo hace desaparecer la inflamación de colon.

-Pera: Es una fruta refrescante, nutritiva y rica en enzimas que, cuando esta madura, resulta muy digestiva. Por la gran cantidad de levulosa que posee es muy bien tolerada por los diuréticos. Muy recomendable en casos de exceso de peso, hipertensión o hinchazones edematosas, así como en enfermos renales y del aparato circulatorio debido a su alto contenido calórico, su elevado poder de eliminar agua a través de la orina y su alto contenido en potasio.

-Piña: Estimula la digestión y la actividad del intestino delgado, previene y corrige los problemas de riñones, vejiga y prostata, cura los dolores de garganta y boca y ayuda a disminuir los dolores menstruales. En zumo envasado pierde las dos terceras partes de su valor nutricional. Al ser un tónico cerebral, combate "dolores de alma" como la melancolía, la depresión y el estres.

-Sandía: En frutoterapia es la encargada de limpiar el riñón. Debe consumirse fresca y fría ya que una vez abierta genera toxinas muy rápidamente. Su pulpa es mineralizante, ayuda a limpiar los tejidos y baja la fiebre. Por sus poderes diuréticos es muy recomendable para quienes padecen de prostata o incontinencia urinaria, así como para quienes tengan gota, reúma o ciática.

-Uva: La cura de uvas tiene merecido renombre y consiste en estar durante dos o tres días exclusivamente a base de esta fruta con el fin de hacer frente a numerosas enfermedades crónicas. Sirve para combatir anemias continuas, desinflar el bazo, dilatar bronquios y controlar ataques súbitos de tensión alta. Antes de consumirla hay que lavarla cuidadosamente para que suelte el sulfato de cobre que generalmente lleva pegado a la piel. En ayunas, su pulpa actúa como laxante y su zumo alivia toses y resfriados.